Díaz Rangel cuestiona silencio de universidades tradicionales frente a incendio de la Unefa-Táchira

El periodista Eleazar Díaz Rangel calificó este domingo como "silencio cómplice" el hecho de que algunos sectores del país, en especial las universidades tradicionales, no se hayan pronunciado sobre el incendio que destruyó, el pasado 18 de marzo, la sede en Táchira de la Universidad Nacional Experimental de la Fuerza Armada (Unefa), y por el cual han sido detenidas cinco personas presuntamente implicadas.

En su columna Los domingos de Díaz Rangel, publicada por el diario Últimas Noticias, el periodista advierte que nadie ha defendido estas acciones terroristas que provocaron la destrucción de salas de estudio, bibliotecas y expedientes de los estudiantes, "pero hay muchos que han guardado un extraño, cómplice y condenable silencio".
Cuestiona el silencio por parte de los Consejos de las universidades tradicionales como los de la Universidad Central de Venezuela (UCV), de La Universidad del Zulia (LUZ), de la Universidad de Los Andes (ULA) y de la Universidad de Carabobo (UC), "tan activas como han estado en estas semanas de disturbios, pero ni una palabra de condena. Ni una sola deplorándolo".
Añade que tampoco lo han hecho los que integran la Asociación de Rectores de Venezuela. "No podían faltar en esa complicidad las asociaciones de profesores universitarios, tan locuaces en la denuncia, ni la mayoría de sus federaciones y centros estudiantiles".
"Todos los profesores y académicos están en la lista de los 100 mil egresados ucevistas, más los de otras universidades. ¿Cómo responderán ante la historia? Porque no creerán que el incendio y destrucción de las instalaciones de la Unefa tachirense es noticia de un día, que nada quedará registrado en esta otra historia de la infamia, aunque en los libros de actas de estas instituciones no aparezca una sola línea registrándolo", expresa el periodista.
Relata que en la historia venezolana, o en la de la región, no se halla un ataque parecido al de la Unefa, más allá de períodos largos de clausuras, no sólo en épocas de dictaduras, sino de la democracia representativa, allanamientos y reducción de presupuestos.
"En ninguna parte se puede encontrar que alguna vez hubiese sido incendiada y destruida una universidad venezolana y, seguramente, tampoco ha ocurrido en el resto de los países latinoamericanos. Ni en el Chile de Pinochet, cuando también quemaron bibliotecas", denunció Díaz Rangel.
 AVN